El Director General de Servicios Penitenciarios y Correccionales Roberto Santana Sánchez, destacó este sábado la importancia de la gestión adecuada de la nueva cárcel de Las Parras, un proyecto que involucra a más de 8,500 privados de libertad y cerca de 4,000 empleados. Según Santana, la operación del centro penitenciario es clave para garantizar la seguridad y evitar que los internos queden bajo control de grupos criminales.
“Un centro penitenciario, si se maneja correctamente, es un factor de seguridad, de armonía, de paz democrática, pero descontrolado y guiado por los grupos criminales y por la corrupción es un peligro de cualquier comunidad”, afirmó Santana Sánchez durante la inauguración del proyecto.
El funcionario también hizo un llamado a la responsabilidad de la sociedad y los medios de comunicación en la vigilancia de la institución: “Ustedes le ponen atención a esto, o esto se pone fuera de control y van a tener que mudarse de aquí todos, porque esto fuera de control no los va a dejar vivir. Se lo digo públicamente aquí hoy, para que no digan que no se lo dijeron”.
La nueva cárcel de Las Parras, diseñada para albergar hasta 8,500 internos, contará con un modelo operativo basado en educación y trabajo obligatorio, instalaciones de última tecnología y personal multidisciplinario especializado. Se estima que más de 30,000 personas estarán involucradas diariamente entre internos, empleados y visitantes, consolidando un enfoque de rehabilitación integral y seguridad pública.