Antes de que existieran el Estadio Quisqueya, el Tetelo Vargas o el Cibao, “La Normal” fue la cuna del béisbol dominicano. Inaugurado el sábado 24 de agosto de 1946 bajo el nombre “Estadio Presidente Trujillo”, se convirtió en el primer estadio de béisbol construido en la República Dominicana y en símbolo de la era dorada del deporte que hoy mueve multitudes.
El legendario parque marcó el nacimiento del béisbol organizado en el país y fue escenario de los primeros cuatro torneos del béisbol profesional dominicano (1951-1954), donde se gestaron algunos de los capítulos más memorables del deporte nacional.
Sin embargo, casi ocho décadas después, “La Normal” luce en un estado deplorable, con gradas destruidas, baños inservibles, falta de agua y un terreno que ya no reúne condiciones mínimas para jugar.

Cuna del béisbol dominicano
El Estadio La Normal no solo fue el primer escenario oficial del béisbol profesional, sino también testigo de momentos históricos.
- En 1948, fue la base de entrenamientos de los Dodgers de Brooklyn y su filial, los Reales de Montreal, con estrellas como Jackie Robinson, Roy Campanella y Pee Wee Reese.
- En 1949, el campeón mundial de boxeo Joe Louis ofreció allí una pelea de exhibición.
- En 1952, se transmitió desde su terreno el primer partido de béisbol por televisión en República Dominicana.
- En 1954, Guayubín Olivo lanzó el primer juego sin hit ni carrera en la historia del béisbol profesional local.
Durante los años 50, “La Normal” fue la casa del béisbol profesional dominicano, hasta que en 1955 se inauguró el Estadio Quisqueya, desplazando su protagonismo.

De “Presidente Trujillo” a “Osvaldo Virgil”: un nombre con historia
Tras varias décadas de cambios, el Congreso Nacional aprobó el 6 de abril de 2021 una ley que designa oficialmente el recinto como “Estadio La Normal Osvaldo Virgil”, en homenaje al primer pelotero dominicano en debutar en las Grandes Ligas.
La iniciativa, propuesta por el senador Franklin Romero (PRD), también declaró el 23 de septiembre como “Día del Pelotero Profesional de la República Dominicana”.
“Osvaldo José Virgil Pichardo abrió el camino a cientos de dominicanos en las Grandes Ligas. Hoy son más de 925 los que han seguido sus pasos”, establece la ley.
Pese al reconocimiento, el estadio permanece abandonado, cubierto de maleza y sin señales de restauración. “Tiene nombre por ley, pero hoy es un chiquero”, lamentan los veteranos del béisbol.
A pesar de su deterioro, La Normal sigue siendo el principal centro del béisbol infantil del Distrito Nacional, con más de 10 academias activas que impactan a 22 barrios populares, entre ellos Villa Juana, Capotillo, Villa Consuelo, Simón Bolívar, Gualey y Los Guandules.
Del esplendor al relevo: los demás estadios del país
Tras el auge de “La Normal”, República Dominicana vivió una expansión del béisbol profesional con la construcción de nuevos parques que hoy son emblemas del deporte nacional:
Estadio Quisqueya Juan Marichal (Santo Domingo)

- Inaugurado: 1955
- Equipos locales: Tigres del Licey y Leones del Escogido
- Capacidad: 14,469 personas
- Conocido como: “El Coloso del Ensanche La Fe”
Estadio Cibao (Santiago)

- Inaugurado: 1958
- Equipo local: Águilas Cibaeñas
- Capacidad: 18,077 espectadores
- Apodo: “El Valle de la Muerte”
Estadio Tetelo Vargas (San Pedro de Macorís)

- Inaugurado: 1959
- Equipo local: Estrellas Orientales
- Capacidad: 8,000 personas
- Apodo: “Casa de los Big Leaguers Dominicanos”
Estadio Julián Javier (San Francisco de Macorís)

- Inaugurado: 1975
- Equipo local: Gigantes del Cibao
- Capacidad: 12,000 espectadores
Estadio Francisco Micheli (La Romana)

- Inaugurado: 1979
- Equipo local: Toros del Este
- Capacidad: 10,000 personas
Una joya olvidada que pide volver a brillar
Del béisbol profesional de 1951 a las grandes figuras en las ligas mayores, el Estadio La Normal es más que un campo deportivo: es un monumento histórico nacional.
Hoy, ese templo que vio nacer la pasión nacional espera una restauración urgente y el reconocimiento que merece como símbolo fundacional del béisbol dominicano.