Tras más de 12 años de larga espera y constantes reclamos, el Gobierno concluyó la Ciudad Sanitaria Luis Eduardo Aybar con la entrega del Hospital General Clínico Quirúrgico “Dr. José Joaquín Puello Herrera“, nombrado en honor al actual director del complejo, por su trayectoria y labor social.
El programa N Investiga habló con el Dr. Puello Herrera e hizo un recorrido para ver una obra que fue muy demandada y que enfrentó varios obstáculos durante su proceso de construcción.
Puello reveló que la Ciudad Sanitaria, recientemente concluida y entregada, debería producir 10 mil millones de pesos al año para su autogestión.
La Ciudad Sanitaria Luis Eduardo Aybar tiene sus raíces en 1945, cuando se dispuso la construcción de un hospital en el sector Mejoramiento Social de Santo Domingo, entonces Ciudad Trujillo. Inicialmente llevó el nombre del médico estadounidense William Morgan y fue inaugurado en 1946. En 1961, tras la caída del régimen, pasó a llamarse Dr. Luis Eduardo Aybar, en honor a uno de los más emblemáticos cirujanos dominicanos.
Luego, en 1991, con aportes de la Agencia de Cooperación Japonesa, se inauguró el Centro de Gastroenterología del Hospital y, en abril de 1992, la Unidad de Quemados Earl Ort, donada por un filántropo norteamericano. En 2008, se inauguró el Centro de Oftalmología, Neurocirugía, Cardiología y Trasplantes, conocido como Cecanot.
Después de casi siete décadas, en 2014, el viejo hospital cerró sus puertas para dar paso a la construcción de la Ciudad Sanitaria, que agregaría un hospital materno infantil y otro para consultas externas, así como el remozamiento del Cecanot y edificios administrativo y docente.
El 8 de julio de 2013, el entonces presidente Danilo Medina dio el primer palazo y el 31 de diciembre de 2014 se demolió el Hospital Luis Eduardo Aybar y el Servicio Nacional de Salud hizo formal entrega formal de la infraestructura a Marcos Dionisio, presidente del Consorcio Consmara-Seminsa, contratado por la OISOE para la obra que sería entregada en mayo de 2016 con una inversión total de RD$6,900 millones.
El tiempo demostraría que se inauguraría 11 años después en su totalidad y a un costo extremadamente superior. La obra levantada en un área de 88 mil metros cuadrados fue supervisada en unas 8 ocasiones por el entonces presidente Danilo Medina, entre 2015 y 2019, hasta que salió del poder sin haberla concluido, dejándola según algunas versiones en un 75% de ejecución. Mientras, se denunció también que los equipos médicos que habían sido adquiridos por más de 18 mil millones de pesos se dañaron y después de 4 años sin uso perdieron la garantía. Constructores y suplidores fueron sometidos a la justicia.

En diciembre de 2021, durante el Gobierno de Luis Abinader, empiezan a inaugurar los edificios que componen la Ciudad Sanitaria en varias etapas. En diciembre de 2021, se entregó el edificio B2 de Consultas Externas, un espacio que meses antes de ser terminado fue temporalmente habilitado para atender pacientes críticos y de recuperación de covid, debido a la alta demanda, convirtiendo las áreas de emergencia, triaje y trauma shock en una zona de cuidados intensivos, en la cual, N Investiga hizo un desgarrador reportaje, en junio de 2021, en medio de la tercera ola de la pandemia, viendo de primera mano la dedicación y el cansancio del personal médico, así como el dolor y la agonía de los pacientes.
Actualmente este bloque, reabrió sus puertas para toda la población y otros servicios de especialidad. En agosto de 2024, se inauguró el edificio A de la Ciudad Sanitaria, destinado a servicios administrativos y docencia; y en diciembre de 2024, el edificio B1 Materno Infantil. El proceso culminó el pasado 30 de septiembre con el Hospital General Clínico Quirúrgico “Dr. José Joaquín Puello“, que abarca atención clínica, quirúrgica y de emergencias y en cuyo acto inaugural, el presidente Abinader reconoció que hubo obstáculos a lo largo de la construcción.
En noviembre de 2018, N Investiga hizo un reportaje en el que denunció como en octubre de 2018, la OISOE había realizado su segundo adendum a la obra de casi el monto total, y lo que en principio se concibió con una partida de un poco más de 6 mil millones de pesos, cinco años después, subió a más de 14 mil millones de pesos, en favor del Consorcio Consmara-Seminsa, constituido por las Sociedades de Comercio Servicios Electro-Médicos e Institucionales y la Sociedad Constructora Marial y Asociados, violando la Ley de Compras que establece un tope de un 25% del monto original de la obra.
En noviembre de 2020, Contrataciones Públicas depositó documentos relativos a la ejecución de este contrato ante la Pepca, lo que no impidió que el actual ministro de Vivienda, Hábitat y Edificaciones, Carlos Bonilla, el 9 de diciembre de 2021, hiciera una modificación con el propósito de continuar la obra por más de 992 millones 765 mil pesos para un total, incluyendo del presupuesto del contrato base, de 15 mil 854 millones 279 mil 925 pesos con el mismo consorcio. Sin embargo, tras una auditoría que reflejó un rojo de unos 3 mil millones de pesos pagados de más a la compañía, la obligaron a invertir ese monto en la obra y este adendum no se ejecutó.
Todo el complejo concluyó con una inversión total de RD$18,000 millones de pesos, (cifra que varía), es decir, unos 12 mil millones de pesos por encima del monto original en 2013, de los cuales el Gobierno de Abinader ejecutó RD$3,207 millones para concluir cerca del 30% de las obras pendientes.
¿Y el mantenimiento del gran complejo sanitario? “Hay la cultura de no mantener no solamente los hospitales, las oficinas públicas; entonces es una cultura que los americanos tienen que aprender, señores, que esto nos costó a todos pues, obviamente, que esto tiene que ser mantenido como está ahora e invertir en el mantenimiento que es casi invertir como la construcción”, expone el Dr. Puello Herrera.
Gran hospital
El hospital general, que honra con su nombre al Dr. Puello Herrera, es la joya de la corona de la Ciudad Sanitaria, una edificación de 6 niveles y 2 sótanos, con un área de 48 mil metros cuadrados, que cuenta con emergencia general, crítica y de quemados, farmacia, área de imágenes, 232 camas de hospitalización, 14 quirófanos generales, 40 cubículos de UCI, 24 cubículos generales y 4 aislados de hemodiálisis, así como un laboratorio, áreas de trauma y hemodiálisis, así como un helipuerto.
NP: ¿Qué novedad tiene este hospital que uno pueda decir vaya, mereció la pena la espera?
Puello Herrera: Bueno, en primer lugar la infraestructura, con esta infraestructura de primera, muy costosa de última, de verdad de última generación. Tú sabes que la gente habla mucho de última generación, esta de verdad que es de última generación y, además, la infraestructura humana, que nosotros aceptamos los médicos que tienen muy alto nivel de preparación.
NP: ¿Cuántos médicos van a trabajar aquí?
PH: Aquí finalmente nosotros, en total tenemos 996 médicos en total. Aquí van a estar más o menos la mitad, van a estar aquí.
NP: ¿Cómo en cuantas personas, pacientes vienen a toda la ciudad sanitaria?
PH: Al día de hoy, nosotros estamos recibiendo entre 4 y 5 mil personas por día, pero aquí viene el gran pero. Cuando abra ahora full este hospital, nosotros pensamos que la matrícula va a llegar a 15 mil personas por día.
NP: Entonces, ¿qué significa mantenimiento?
PH: Significa seguridad, significa tener los insumos a tiempo, significa tener todo el personal realmente… no solamente acreditado, sino entrenado para los equipos modernos que tuviste. Entonces, este es un trabajo que nos va a llevar 4 o 5 meses en completar.
Puello Herrera destaca que van a tener tres tomógrafos: “vamos a tener resonancia magnética, es un hospital completo, no necesitan ningún tipo de aparatos para hacer diagnóstico…” Indica que ahora solo hay una, pero llegarán dos más, dentro de unas semanas.
NP: ¿Tiene un presupuesto mensual de cuánto va a costar, por ejemplo, solo este hospital?
PH: Cada hospital tiene su propio presupuesto. Y va a tener un presupuesto en principio, aquí medio calladito, medio costoso. Medio costoso. A corto. De 993 millones de pesos. Pero aquí viene el tema económico: si la Ciudad Sanitaria funcionara como un papel de música, como un papel de música, con una ocupación de un 85% y manejada sin aquello, verdad, sin que haya dinero por debajo, etcétera, etcétera, la Ciudad Sanitaria debe producir 10,000 millones de pesos al año. Y se puede mantener por sí sola. Y nosotros aspiramos a que sea el modelo de gestión pública en salud.
NP: Y para eso tendría que hacerse qué…
PH: Entonces, para eso, lo que hay que hacer es tener un buen personal, personal bien pagado, de alta, de alto nivel, porque yo entiendo que sí, que los partidos políticos tienen sus responsabilidades y nombren gente, pero yo creo que el personal que se debe escoger debe ser un personal de alto nivel y que haya un filtro, realmente, para los que van a venir.
Durante el recorrido, agregó: “Esto está construido con el protocolo de los grandes hospitales de Estados Unidos. Tuvimos muchos consejos de parte de ellos. Por eso tù ves la amplitud de la habitación, de los pasillos son sumamente anchos”.
NP: A veces uno piensa que un país como este en vías de desarrollo y tener una infraestructura de esta naturaleza que se necesita mucho personal, realmente preparado, mucho mantenimiento, mucho dinero para mantenerlo, está sobredimensionado para la realidad del país.
PH: Bueno, es probable que sí, que así sea, porque, y no lo digo yo, lo dice la gente que viene. Todo el que viene aquí, no ya son increíbles, de Montefiore, del Hopkins, que Mayo Clinic, de Cleveland Clinic…, la gente no nos va a creer que este país tiene una ciudad sanitaria como esta. Entonces, la responsabilidad de nosotros, en este caso mío directamente, es que esto se mantenga bien. Y que demos un ejemplo.
NP: Estos hospitales, pero en específico este hospital, ¿cómo se va a mantener?
PH: Bueno, esencialmente de las ARS, pero la ARS principal para este hospital, y yo lo quiero dejar muy claro desde el principio de la entrevista, es SeNaSa, porque la matrícula de los pacientes que vienen aquí son del régimen subsidiado. Si yo te doy el número tú no lo vas a creer: 98% de la gente que viene aquí es del régimen subsidiado.
NP: Esta es emergencia crítica, ¿qué significa?
PH: Que viene realmente enfermo, entonces cada camilla es una camilla donde puede venir.
NP: ¿Cuántas camillas hay aquí?
PH: Aquí tenemos 8.
NP: ¿8 en total?
PH: Emergencias críticas. En total tenemos 40.
NP: ¿Cuánto tú dices general, general, dónde es?
PH: “Tenemos críticas y paliativas, en esta zona tenemos 12 y así hasta llegar a 40. Esto es único en los hospitales modernos. Sí, este es el paciente que viene, es realmente enfermo.
NP: ¿Eso es lo que se llamaba antes Cuidados Intensivos? No, es mucho más que eso. ¿Por qué? Porque este es el paciente que en cualquier momento puede morir. Entonces, aquí es que viene. Y aquí entonces los médicos, los intensivistas y los emergenciólogos, los tratan aquí antes de llevarlo a cirugía o al intensivo normal. Esto es importante porque Dios no lo quiera… y si sucede algo en la frontera y hay heridos, ¿adónde van a ir? O se cae un avión, Dios no lo permita, hay un helipuerto aquí. Entonces, esto es verdaderamente único ahora mismo en los hospitales del Estado.
NP: ¿Y qué con qué cuenta, por ejemplo, la aparatología? Todo lo que tú ves ahí en las paredes, ahí está todo para salvar la vida de un ser humano. Absolutamente todo, desde ventiladores hasta resucitadores, ahí lo tenemos todo y ya instalados para ser usados.
NP: La Inteligencia Artificial está muy de moda, ¿cómo este hospital entrará en ese mundo?
PH: En neurocirugía lo que estamos solicitando es ser el primer hospital público de América del Sur que tenga inteligencia artificial para neurocirugía. Aquí tenemos rayos 6, inmediatamente cuando vienen los pacientes, que es un carrito eléctrico, mira trauma shock. Esto es importante, esto es para trauma nada más el paciente que viene traumatizado; aquí está todo para salvarle la vida y preservarle la vida listo para ser usado.
NP: ¿Pero qué es lo que hay que implementar para la inteligencia artificial?
PH: Simplemente comprarla, la inteligencia artificial para la Ciudad Sanitaria anda por los 170 millones de pesos, eso es todo. Yo he encontrado una buena receptividad en el Gobierno, no puedo decir lo contrario, pero ya sé que implementarlo, porque ya la medicina cambió.
Y continúa: “la amplitud de estos quirófanos, esto está bajo los protocolos modernos, que prácticamente caben entre 8 y 10 médicos trabajando aquí. Si tú notas algo interesante es que todo viene del techo. La otra cosa interesante..
NP: ¿Cuál es lo bueno que venga del techo?
PH: O sea, que no hay que arrastrar ningún equipo. Sin ver la cara del paciente, la cirugía se graba, pero sin mostrar al paciente, es una cara del paciente. Eso va a una hemeroteca para que los estudiantes puedan ver la operación. Pero si ellos están aquí, nosotros podemos mandarle la cirugía al piso docente, que es un auditorio enorme, y ellos la pueden ver en tiempo real.
Y añade: “Aspiramos que, de alguna manera en un futuro, que ahora no sea muy lejano, que nosotros podamos tener aquí la Escuela de Medicina de la UASD, que venga aquí, que tenga su género, eso está programado.”
“Estas pantallas están conectadas con, todavía no la tenemos prendida, pero tenemos 600 kilómetros, 600 de fibra óptica. Entonces, todos los kilómetros.
NP: O sea aquí pongo el nombre del paciente.
PH: El nombre del paciente, te sale su historia, las radiografías te salen de este lado, entonces tú no tienes que abrir el récord.
NP: Ah, claro, nada de papeles, todo acá.
PH: No, porque los papeles infectan mucho también.
Explica que hay Unidad de Quemados, considerada por las autoridades como la más moderna del Caribe, con 16 camillas, una UCI especializada y oficinas para el personal médico, lo que beneficiará a un significativo número de pacientes tomando en cuenta que se atienden unas 3,700 emergencias térmicas al año, de las cuales el 10% ameritan ingreso. República Dominicana ocupa el puesto número 1 en quemaduras eléctricas, en una abrumadora mayoría resultado del robo de energía eléctrica.
“Este es el área de hidroterapia, aquí tenemos una emergencia. Esta área es para los pacientes que necesitan una limpieza rigurosa, entonces aquí tenemos una tina donde los metemos; aquí lo limpiamos con agua tibia, fría, dependiendo de lo que el paciente amerite y si es una limpieza, generalmente para esos pacientes que están con bastante contaminación”, apunta Eddy Bruno, director de la Unidad de Quemados.
NP: Esto nunca lo había visto, hay en otro hospital
EB: No, aquí tenemos uno una, ya una aquí tenemos tres. Este es el aparato con el que tomamos la piel del paciente para hacer los injertos, totalmente nuevo.
Puello Herrera manifiesta: “Y aquí hay temas, y uno de los temas no solamente es la mejoría del entorno, porque eso tiene una replicación de lo que es la Ciudad Sanitaria, en qué término, o en términos económicos, la plusvalía. Una vez tú tienes una edificación como esta, ya las casas que antes costaban aquí alrededor de 700 mil pesos, hay más de un millón de pesos, entonces el entorno hay que mejorarlo, y eso es una labor que tiene que ejecutarla, quien tiene que ejecutarla, eso es parte de la alcaldesa, de la Alcaldía, de la Digessett.”
“Aquí los motores no pueden estar andando en vía contraria, aquí no puede haber, aunque deben ganarse la vida, los buhoneros que vienen en las aceras nuestras. ¿Por qué? Esto te lo digo con el dolor de mi alma: cuando a nosotros se nos infecta un paciente de un hongo o una bacteria, que ahora la gente no se imagina, los estudiantes de medicina que nos están escuchando, tía mía, nos están viendo, ellos saben de lo que yo estoy hablando, hay bacterias que nosotros no conocemos, y entran aquí. Un paciente con una infección severa de estas bacterias nuevas, nos cuesta 80 mil pesos diarios, en antibióticos. Entonces esto hay que cuidarlo y quien tiene que cuidarlo es la gente que viene aquí, son los médicos”.
Este enorme y moderno hospital también posee un área de hemodiálisis con 28 sillones, distribuidos en 24 cubículos generales y 4 para pacientes aislados.
“Esto es hemodiálisis. Tú dirás por qué alguna cosa trae a los otros, si un paciente es hipertenso y es diabético, y no se cuida el primer órgano que se daña, el relleno. Ya que no se lo obtenemos, no sé qué cantidad, la prueba va a haber ahora menos de 288. Ahora tenemos otra unidad en Cecanot, entonces quisimos hacer esto, para que no hubiera un dominicano que no tuviera la posibilidad de hacerse un hemodiálisis”.
Hospitales
Con este hospital, ya suman un total de 80, entre nuevos y remozados, inaugurados por Luis Abinader, incluyendo algunos cuyas deplorables condiciones y lentitud en los trabajos de construcción hemos denunciado, como el hospital Arístides Fiallo en La Romana, presentado en noviembre del pasado año, con un precaria área de emergencia, falta de equipos y una obsoleta sala de cirugía que carecía de los aparatos básicos.
Casi un año después de nuestra visita, el 10 de octubre de 2025, finalmente se inauguró una nueva Emergencia, así como un nuevo Bloque Quirúrgico y un bloque de internamiento. También se anunció la construcción de un nuevo Hospital Dr. Arístides Fiallo Cabral, previsto a iniciar en 2026, ya que la actual infraestructura fue construida hace 75 años. Mañana domingo, también se inaugurará el Hospital San Vicente de Paúl, en San Francisco de Macorís, que N Investiga había reportado en diciembre de 2024, en estado crítico y lentitud en la construcción de la nueva infraestructura.
NP: ¿Piensa que es misión cumplida o no?
PH: No, no, los hospitales son como los niños, un niño crece, es un bebecito de un mes de nacido, él va a crecer, se va a desarrollar, los hospitales son exactamente lo mismo que un ser humano. Este hospital nació, ahora es un bebé, él va a tener que crecer.
En definitiva, luego de tantos años de espera, la Ciudad Sanitaria “Luis Eduardo Aybar” llega con el peso de las expectativas. Sí, se entregó un hospital con quirófanos, camas, tecnología. Pero el desafío real empieza ahora: que los equipos funcionen, que los profesionales estén preparados, porque al final, lo que importa no es el edificio, sino lo que pase dentro: que quien llegue tenga atención de calidad. Y que cada peso invertido, cada metro cuadrado, cada enfermo atendido, cuente como el inicio, y no como el cierre, de una histórica deuda nacional con la salud en el país.
