En el ambiente político se da como un hecho que el presidente Luis Abinader, tras culminar su ejercicio presidencial el 16 de agosto de 2028, se mantendrá en la primera línea de la actividad política, pero como presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), propuesta que ha sido respaldada por importantes dirigentes perremeístas, entre los que se destaca el actual presidente de la organización, José Ignacio Paliza.
“Yo he expresado formalmente y públicamente que el dirigente político que tiene hoy las condiciones más optimas, más fuertes, más definidas que puede ayudar aún más con la unidad del partido, aunque el partido vive un buen momento en sus relaciones Inter partidarias pero siempre es propio trabajar más y hacer más, sería el propio presidente Luis Abinader”, manifestó Paliza recientemente, tras encabezar un encuentro donde se determinó que la convención para elegir a sus autoridades se realizará en junio del 2026.
Durante los últimos 25 años, en el país ha existido una tendencia clara: los que han ejercido la Presidencia de la República, tras culminar su mandato suelen asumir de inmediato la presidencia de sus respectivos partidos políticos.
Este patrón se ha consolidado como una especie de norma no escrita dentro del sistema político, ya que ha permitido a los exmandatarios mantener influencia directa sobre las decisiones estratégicas, candidaturas y alianzas políticas, así como preservar una importante cuota de liderazgo dentro de la organización.
La excepción más notable a esta regla es el ex presidente Hipólito Mejía (2000-2004), a quien no le interesó ocupar posiciones orgánicas de liderazgo partidario, tras culminar su mandato presidencial, a pesar de que tuvo que enfrentar al entonces presidente de su propio partido, el Revolucionario Dominicano (PRD), Hatuey De Camps, quien se opuso abiertamente a su intento de reelección.
Esta postura en evidente contraste con sus sucesores, los expresidentes Leonel Fernández, (1996-2000; 2004-2012) presidente de la Fuerza del Pueblo (FP) y Danilo Medina (2012-2020), presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Fernández, tras sus mandatos, consolidó un fuerte liderazgo dentro del PLD, influyendo en candidaturas, estrategias electorales y decisiones internas, y se ha mantenido como la cabeza de su organización política, de igual modo, Danilo Medina ha seguido un patrón similar, como presidente del PLD, mantiene una gran influencia de la agenda política del partido.